Un grupo de propietarios de restaurantes y hoteles está haciendo circular una petición contra lo que describen como cierres forzosos sin sentido antes de una demanda que planean presentar contra el gobierno checo. Se vieron obligados a cerrar el viernes pasado, solo una semana después de que se levantara el segundo bloqueo de 2020, debido al empeoramiento de las tasas de infección. La evidencia sobre los riesgos de contraer Covid-19 en los restaurantes es mixta, pero muchos establecimientos se negaron a respetar los horarios de cierre obligatorios de las 11:00 pm. Pero argumentan que, habiendo sido diezmados por los dos cierres anteriores, necesitan recuperar los ingresos perdidos haciendo la mayor cantidad de negocios posible en la ajetreada temporada navideña. “Nuestro objetivo común es detener este comportamiento, la cancelación de todas las restricciones gubernamentales y el fin del estado de emergencia”, dijo el propietario del restaurante Seberak, Jakub Olbert. Dijo que si bien entendía la gravedad de los riesgos para la salud, no sentía que el gobierno hubiera comprendido cuán graves son las pérdidas para los dueños de negocios en la República Checa.
