Los bancos aprobaron solicitudes de aplazamiento de más de 180.000 préstamos hipotecarios durante la primera ola de la pandemia. El propósito de los aplazamientos era evitar incumplimientos entre los prestatarios cuyos trabajos o negocios habían sido interrumpidos por restricciones impuestas por el gobierno. El período de aplazamiento finaliza a principios de noviembre, justo a tiempo para que las nuevas medidas gubernamentales cierren gran parte de la actividad económica del país. Esta realidad ha llevado a las oficinas laborales a agregar asistencia hipotecaria a los formularios que está proporcionando a las personas que solicitan apoyo de emergencia del estado. Hospodarske noviny dice que las condiciones para recibir apoyo se han relajado hasta tal punto que las personas de la clase media ahora son elegibles para recibir apoyo. Para calificar, los solicitantes deben poder demostrar que sus ingresos se vieron afectados negativamente por la pandemia y que esta es la razón por la que ahora se encuentran en dificultades económicas. Al decidir a quién ayudar, las oficinas laborales considerarán solo los ingresos actuales de los solicitantes, no sus activos físicos, como automóviles o bienes raíces.
