Covid-19 en la República Checa ahora se está propagando más rápido que en cualquier otro lugar de Europa, pero el gobierno dice que no se está considerando un bloqueo total. La mayoría de las escuelas, teatros y restaurantes han sido cerrados y solo se permiten los eventos más pequeños, pero los centros comerciales permanecen abiertos y solo se “anima” a los empleados a trabajar desde casa. A partir del miércoles, las máscaras deberán usarse afuera donde haya personas a menos de dos metros entre sí, así como en automóviles cuando cualquier persona que no sea un miembro de la familia esté en ellas. El nuevo ministro de salud del país, Roman Prymula, parece estar retrocediendo en los planes de evaluar a toda la población para detectar Covid-19 luego de una reacción violenta de los médicos generales con exceso de trabajo. Prymula dijo que el gobierno esperará para ver si las restricciones actuales logran reducir la propagación de la infección antes de debatir la posibilidad de un segundo bloqueo.